Un vuelo chárter es el que no es regular, es decir, el que se realiza a medida de la demanda que va surgiendo en todo momento.
Otra forma de llamar a los vuelos chárter es como vuelos no regulares, para diferenciarlos de los vuelos regulares.
Tabla de contenidos
Características
Las principales características de un vuelo chárter son:
- No es un vuelo programado con antelación sino confeccionado a medida.
- No tiene conexiones regulares entre dos aeropuertos.
- No tiene un itinerario y precio fijos. Todos los detalles del vuelo como itinerario, horarios, condiciones y precios se fijan sobre la marcha.
- No es accesible libremente por cualquier consumidor. No solo por el precio, que será más elevado que el de los vuelos regulares sino porque se negocia aparte.
Partes de un vuelo chárter
Las tres partes que entran en juego en un vuelo no regular o chárter son:
- El fletador del vuelo: es la empresa o persona interesada en contratar los servicios de la compañía chárter.
Suele tratarse de un turoperador que es capaz de llenar un vuelo con turistas a los que confecciona un paquete vacacional (viaje combinado), pero podría tratarse de un club de fútbol o de un cantante o deportista que fleta un avión privado.
- El transportista aéreo: es la compañía aérea que realizará el servicio consistente en el transporte no regular de una serie de pasajeros y sus pertenencias siguiendo un itinerario previamente acordado.
Esta compañía chárter suele alquilar las aeronaves para prestar el servicio.
- El pasajero aéreo y la tripulación de abordo: son las personas que viajarán.
Compañía chárter
Según la web de Aena, las compañías chárter tienen su origen en 1954, cuando la Comisión Europea de Aviación Civil (CEAC) convocó una Conferencia en Estrasburgo para la Coordinación del Transporte Aéreo en Europa a petición del Consejo de Europa.
En ese momento se suscribió un acuerdo multilateral sobre los derechos de los vuelos no regulares -tráfico chárter- en la región de Europa para estimular el desarrollo del tráfico turístico en el interior de las fronteras del Viejo Continente. Y para atender las nuevas demandas del transporte aéreo como complemento de los vuelos regulares.
Junto a este tímido proceso liberalizador, el mercado de las aeronaves comenzó a abaratar cada vez más el coste asiento-kilómetro.
Las compañías regulares empezaron a sustituir sus flotas de aeronaves con motores de émbolo por las de reacción, surgiendo un mercado de segunda mano durante la década de los sesenta en el que los aviones convencionales fueron adquiridos por las compañías chárter a precios muy económicos y sus ofertas de transporte aéreo alcanzaron límites insospechados, inimaginables en el momento de su creación.
La primera compañía española de vuelos no regulares (vuelos chárter) fue creada en 1944. Su nombre fue Compañía Auxiliar de Navegación Aérea (CANA).
En 1948 fue un grupo económico bilbaíno el que constituyó la compañía Aviación y Comercio (AVIACO).
Algunos años después, en 1960, nació Spantax, dedicada al tráfico no regular y de vacaciones.
Fuente: elaboración propia y www.aena.es
