Los últimos años estamos viviendo el furor de los vehículos de movilidad personal. Es cierto que los patinetes eléctricos están dando mucho que hablar, pero desde mucho más tiempo las bicicletas han sido la solución a la libre movilidad y sin malos humos. En este post intentaremos poner los pros y contras de moverse en bicicleta y comprar bicicletas eléctricas o alquilarlas.
Tabla de contenidos
Cómo está el tema de la bici en la ciudad
En España, según una encuesta de junio de 2017 (Barómetro de la bicicleta –GESOP, DGT y Red de Ciudades por la Bicicleta):
-Seis de cada diez usuarios son hombres y cuatro de cada diez mujeres. La mitad de los que utilizan la bicicleta tienen menos de 40 años, un tercio tiene entre 40 y 54 años, y un 17,6% tiene 55 o más años. Así, la edad media se sitúa en los 40,2 años, dos años más que en la anterior oleada. esta proporción 60/40 no varía desde 2008;
-Tres de cada cuatro usuarios de la bicicleta tienen un nivel de estudios medio o alto, y una proporción similar está trabajando o estudiando. Los grupos por perfil de edad que menos usan la bicicleta son el de los jubilados y el de las personas que se dedican a las tareas del hogar;
-Los españoles que saben montar en bici superan el 95% entre los hombres y los menores de 40 años. En cambio, entre las mujeres, los mayores de 54 años y los que tienen menor nivel de estudios no llega al 82%;
-En casi diez años, los que usan la bicicleta una o más veces por semana han pasado de representar el 12,8% de la población al 22,5%.
Moverse en bicicleta por una ciudad (el ciclismo urbano) es una de las opciones más racionales y óptimas para ti y la comunidad. Además de ahorrar mucho presupuesto y de no contaminar, la bicicleta permite devolver a las ciudades lo que nunca deberían de haber dejado de ser: espacios donde caminan y se desplazan silenciosamente personas sin ajetreos ni malos humos.
Ventajas de la bicicleta
La bicicleta como medio de transporte tiene muchísimas ventajas. La principal es que, si conoces tu ciudad y las posibilidades de tus piernas, puedes plantearte llegar a tu destino a tiempo, sin problemas de aparcamiento ni atascos.
Otras ventajas de la bicicleta son:
- No requieres un carné de conducir ni un seguro de responsabilidad civil (aunque es recomendable un seguro de bicicleta);
- Es un medio muy barato de comprar y mantener;
- Es un medio muy fácil de alquilar y utilizar en grandes ciudades;
- Es un medio más barato que el transporte público y no tienes que esperar;
- Es un medio muy bueno para tu salud vascular (es uno de los mejores ejercicios aeróbicos para tu corazón);
- No contamina nada, así que ayuda a descongestionar las ciudades contaminadas con el C02 de los demás coches;
- Se aparca en cualquier sitio.
Inconvenientes de las bicicletas de ciudad
Pero la bicicleta tiene una serie de inconvenientes hoy, que hacen que no se hayan desarrollado todavía al mismo nivel que en ciudades de Centroeuropa con mayor educación vial. Entre otros:
- La bicicleta sigue siendo un medio poco aceptado culturalmente y respetado por el resto de usuarios de las vías públicas con lo cual puede ser peligrosa dentro de la ciudad (en carretera está costando demasiadas vidas);
Solo en 2015 la DGT contó 5.173 accidentes urbanos con bicis versus los 2.013 que hubo en carreteras.
- En ciudades con elevaciones como Madrid y especialmente los días calurosos de verano, llegarás sudando a tu destino (salvo que tengas una bici eléctrica);
- Los días de lluvia y frío además de peligrosos, llegarás a tu destino hecho una sopa;
- Te la pueden robar.
Comprar una bicicleta de ciudad
Si compras una bicicleta para tus desplazamientos por la ciudad en el día a día, tienes la opción de hacerlo en una tienda especializada de bicicletas (Mammoth, Decathlon, Sanferbike, Factorybike etc.) o comprar de segunda mano en webs de segunda mano (Vibbo, Milanuncios, Wallapop etc.).
Entre la gama de categorías de bicicletas recuerda que cada una está pensada para su uso por lo que no es una buena idea mezclar usos. Si vas a usar tu bici en la ciudad, opta por una bicicleta de ciudad o urbana. Y en cuanto al aparcamiento, si no tienes opción segura para dejar tu bici en el trabajo o en tu barrio, opta por una bicicleta plegable. Al final del trayecto podrás plegarla y subir con ella a lugar seguro.
Los precios de las bicicletas de ciudad nuevas oscilan entre los 150 y los 400 euros, y en el mercado de segunda mano puedes encontrarlos desde los 70-80 euros.
A la hora de elegir el modelo ten en cuenta los siguientes aspectos:
- Tamaño del cuadro, ruedas grandes y finas, sin tacos. Sin suspensiones;
- Bicicletas plegables pueden ser más caras pero te permitirán subirla contigo a la oficina en vez de dejarla a la “ventura” en la calle, por mucho candado que le pongas;
- Altura del manillar: elige un manillar alto para tu comodidad (espalda erguida) y la de tu espalda y cuello. Además, una postura erguida te permite ver lo que sucede a tu alrededor;
- Altura del sillín: debemos poder llegar cómodamente al suelo cuando tengamos que hacer paradas en semáforos;
- Visibilidad: una buena bici tendrá elementos de visibilidad (luces delantera y trasera, y reflectantes en las ruedas);
- Comprueba que podrá utilizar accesorios como alforjas, parrilla portabultos, luces, bocina, etc.
Comprar bicicleta eléctrica
Una buena opción para evitar un sobreesfuerzo e ir a una velocidad cómoda en ciudad es la bici eléctrica. Los precios de estas bicis son más altos que los de las bicis convencionales, entre 600 y 2000 euros las más comunes. Además, a lo largo de unos años (cinco a seis) tendrás que sustituir las baterías. Pero qué duda cabe que la suma de ambos, será mucho más económica que la compra de una moto o un coche.
Estas bicicletas te ayudan a dosificar el esfuerzo de la pedalada y consumen un euro en tu recibo eléctrico con una autonomía de unos 60 kilómetros. Tenlo en cuenta si eres un usuario frecuente porque al final de mes puedes tener que pagar un suplemento en tu factura eléctrica si recurres al modo eléctrico a menudo.
Las bicicletas eléctricas pueden cargarse con un cargador de corriente de 220 voltios. Puedes dejar la bici en su sitio y extraer la batería para cargarla en casa (se debe conectar primero el cargador a la caja de baterías, y luego conectar este al enchufe de la toma eléctrica, nunca al revés).
La recarga se completa en un máximo de 8 horas y de 1 a 2 horas si la batería está alta (¾ de su carga).
Alquilar una bicicleta
Otra opción frente a la compra de una bicicleta eléctrica o convencional, muy arraigada en los más jóvenes, son los servicios de bicicletas de alquiler que ofrecen los principales ayuntamientos en España.
Ciudades como Barcelona (Bicing), Madrid (BiciMad), Sevilla (Sevici), San Sebastián o Zaragoza, etc. disponen de estaciones de bicicletas repartidas por la ciudad donde los usuarios pueden dejar o tomar una bicicleta cuando la necesitan, pagando solo por el tiempo usado.
Estos sistemas están pensados para usos cortos, no para quedarse con la bicicleta todo el día, ya que en Barcelona, por ejemplo, los primeros 30 minutos de uso son gratuitos pero luego te facturan a 0,74 céntimos cada media hora adicional. Ojo porque si no devuelves la bicicleta a una estación te cobrarán 150 euros de penalización.
Las empresas gestoras del servicio disponen de una póliza de seguro que cubre la responsabilidad civil del ciclista por los daños corporales o materiales y perjuicios ocasionados involuntariamente a terceros por la práctica del ciclismo, pero, ojo, que no cubren son los daños, robo o hurto causados a la bicicleta.
El coste del servicio de alquiler de bicis en Barcelona cuesta entre 25 y 50 euros anuales.
Comparativa de gastos
Si metemos en el mismo análisis el coste mensual para nuestro español medio de desplazarse en la ciudad para ir al trabajo entre semana a pie, en bicicleta, en bici eléctrica o en metro, empezamos a tener datos interesantes.