Confieso que he tenido muchas motos, de segunda mano y nuevas, que ya son algunos años a las espaldas. Admito que alguna de ellas se me ha quedado sin batería. Y reconozco que cuando me he metido a mecánico, he salido perdiendo siempre, dinero y tiempo. En este post analizamos la batería de moto y los pros y contras de cambiarla por uno mismo o hacerlo en un taller especializado.
Tabla de contenidos
Las baterías de moto son especiales, así que mejor en el taller
No es lo mismo cambiar la batería a un coche que a una moto. A diferencia de los coches donde habitualmente llevan un gran hueco en el capó para la batería, en las motos el hueco es minúsculo, y de tamaño reducido. Y al estar próximo al motor, suele ser poco accesible.
Por esa razón es imprescindible elegir el modelo adecuado de batería de moto. Esta estará pensada para nuestra marca y modelo, con un amperaje y voltaje recomendados por el fabricante en el libro de mantenimiento de la moto.
Esto y otros aspectos me llevan a recomendar no hacer la tarea por nuestra cuenta. Las razones por las que no recomiendo cambiarle nosotros la batería a nuestra moto son las siguientes.
Son difíciles de acceder
El acceso a una batería de moto suele ser muy complicado. Tanto si buscamos desenchufar uno de sus bornes como si queremos sustituirlas, hay que ser muy manitas para llegar a ellas. El hueco en que suelen estar apoyadas las baterías es poco accesible y estanco.
Las motos suelen llevar la batería debajo del asiento, en el hueco debajo del asiento del piloto. A veces son también accesibles desde uno de los laterales quitando una o las dos cachas de la moto. Pero, en general, te puedes tirar más de un rato sólo para acceder a ella.
Ojo con las medidas
El tamaño de la batería importa. Hay distintos tamaños de batería de moto a tener en cuenta por lo que conviene quitar la actual y llevarla a la tienda.
Por experiencia te pido que no se te ocurra acercarte a la tienda de baterías a pedir una batería para «mi moto X modelo Y», sin el original en la mano. Lo más probable es que si no enseñas in situ la batería actual, te den una de distinto tamaño que no te servirá para mucho.
Una vez desprecintada es tuya
Recuerdo hace unos cuantos años haberme quedado sin batería en mi ZZR 600. Me fui tan pancho a la tienda y me traje una que me dijeron que valdría.
En aquellos años 2000 las baterías de moto solían venir sin sellar. Para activarlas, había que rellenar sus distintos compartimentos con un líquido llamado electrolito, hasta el nivel que marcaban las paredes de la batería. El electrolito es una mezcla de ácido sulfúrico y agua destilada que hace de conductor eléctrico y activa la batería no sellada.
Una vez que se le echa el electrolito y se ponen los tapones, la batería está preparada para su uso. Y, por tanto, ya no se puede devolver. Pues bien, cuando fui a poner la batería nueva en su sitio no cabía. El hueco bajo la Kawa era menor que el tamaño de la batería que me dieron.
Volví a la tienda a llorarles hasta que me recompraron mi batería ya activada por un precio menor que el que pagué y me vendieron una segunda batería, esta vez la buena. Total, que el cambio de batería de moto me salió bastante caro, como puedes ver.
Hoy en día las baterías suelen ser de gel y vienen ya selladas desde la fábrica por lo que el taller las instala y nos olvidamos. Estas baterías no se pueden abrir ni rellenar.
La batería vieja es un residuo peligroso
¿Qué harás con la batería vieja sustituida? Mientras que los talleres de moto tienen acuerdos con servicios de recogida de residuos peligrosos, tú no lo tienes. ¿Sabes dónde acabará tu batería usada? Los primeros días en la pared de tu plaza de aparcamiento. Y después de unas semanas te verás tentado a tirarla en cualquier contenedor.
Craso error, e infracción importante a la normativa ambiental. Las baterías de coche y moto son un residuo peligroso sometido a la normativa sobre residuos peligrosos. Esta exige que al final de su vida útil las baterías vayan a un Punto Limpio. Este se encargará de dárselas a una empresa de reciclaje.
Consejos para el mantenimiento de tu batería
La principal regla de las baterías es tenerlas limpias. Especialmente la zona de los bornes y las tapas y compartimentos. En los talleres les suelen aplicar grasa consistente a los bornes para garantizar su durabilidad. Esa grasa cumple su función. No se la quites a los bornes.
La segunda y obvia es arrancar la moto de ven en cuando. Probablemente durante el confinamiento hayas tenido olvidada tu moto con el coste de tener que cambiar o recargar la batería. Esto se podría evitar dándose una vuelta corta con la moto de ven en cuando, con cierta regularidad.
Si no se va a usar la moto durante semanas es aconsejable desenchufar su borne negativo. O si no, usar un cargador de baterías. Tampoco es saludable tener la moto a la intemperie a altas temperaturas. La batería es uno de los elementos que más sufre en altas temperaturas.
