Motor de combustión interna
Un motor de combustión interna es un tipo de máquina que obtiene energía mecánica directamente de la energía química producida por un combustible que arde dentro de una cámara de combustión, la parte principal de un motor.
Se emplean motores de combustión interna de cuatro tipos:
-El motor de explosión ciclo Otto (cuyo nombre proviene del técnico alemán que lo inventó, Nikolaus August Otto): es el motor convencional de gasolina que se emplea en automoción y aeronáutica.
-El motor diésel, (llamado así en honor del ingeniero alemán nacido en Francia Rudolf Diesel): funciona con un principio diferente y suele consumir gasóleo. Se emplea en instalaciones generadoras de energía eléctrica, en sistemas de propulsión naval, en camiones, autobuses y automóviles. Tanto los motores Otto como los diésel se fabrican en modelos de dos y cuatro tiempos.
-El motor rotatorio, lo inventó Felix Wankel, y es el que utiliza rotores en vez de los pistones de los motores alternativos. La principal desventaja de este tipo de motor es que resulta más complicado ajustarse a las normas de emisiones de contaminantes.
-La turbina de combustión, también denominada turbina de gas, es un motor que utiliza el flujo de gas como medio de trabajo para convertir energía térmica en energía mecánica.
Los motores de combustión interna que utilizan combustibles fósiles tienen un impacto negativo sobre el medio ambiente:
-agotan materias primas no renovables.
-consumen oxígeno y agua potable,
-emiten gases tóxicos a la atmósfera contaminándola y contribuyendo al efecto invernadero (dióxido de carbono y óxidos nitrosos), al calentamiento global y, por ende, al cambio climático.
Fuentes:
Wikipedia
Enciclopedia Encarta online