Tabla de contenidos
Seguridad de los productos
La seguridad de los productos es el derecho que nos asiste en el mercado para adquirir y utilizar productos seguros, ya sean nuevos, usados o reacondicionados, ya sean adquiridos de forma onerosa (previo pago) o gratuita.
Producto seguro
Un producto es seguro cuando su uso en condiciones normales no nos provoca ningún daño o riesgo.
¿Qué es un riesgo?
Riesgo es la posibilidad de que las personas consumidoras y usuarias sufran un daño para su salud o seguridad, derivado de la utilización, consumo o presencia de un producto.
La seguridad de los productos es una de las cinco garantías y derechos básicos de los consumidores (salud y seguridad, intereses económicos, información, indemnización y audiencia).
Qué dice la ley
La normativa de protección de los consumidores* vela porque los productos que se ponen en el mercado sean seguros.
Si un producto concreto no dispone de una normativa específica de seguridad o ésta no cubra todos los riesgos o categorías de riesgos del producto, para evaluar su seguridad, garantizando siempre el nivel de seguridad que los consumidores pueden esperar razonablemente, se tendrán en cuenta los siguientes elementos:
-Normas técnicas nacionales que sean transposición de normas europeas no armonizadas.
-Normas UNE.
-Las recomendaciones de la Comisión Europea que establezcan directrices sobre la evaluación de la seguridad de los productos.
-Los códigos de buenas prácticas en materia de seguridad de los productos que estén en vigor en el sector, especialmente cuando en su elaboración y aprobación hayan participado los consumidores y la Administración pública.
-El estado actual de los conocimientos y de la técnica.
Excepciones de la norma
La normativa de protección de los consumidores excluye del deber de seguridad a los productos usados que se suministren como antigüedades o para ser reparados o reacondicionados antes de su utilización. Y ello siempre que el proveedor informe de ello claramente a la persona a la que suministre el producto.
Quién nos protege de los productos inseguros
En España (internamente entre las Comunidades autónomas) y a su vez en Europa existe una red de alerta rápida de notificación de productos no alimentarios inseguros (para los alimentarios existe el RASFF), conocida por las siglas RAPEX o en inglés por Safety Gate (puerta segura).
El sistema de alerta rápida está dispuesto en forma de red de instituciones y organismos, siendo el representante español de la red el Ministerio de Consumo, a través de su Dirección General de Consumo (Príncipe de Vergara, 54, Madrid).
* Real Decreto 1801/2003, de 26 de diciembre, sobre seguridad general de los productos.