Paseando estos días por las estanterías de El Corte Inglés, sección de juguetes, con hijo e hija preadolescentes llegamos a la presentación de los juguetes de la marca propia de ese establecimiento, Miyo. Y me llamó la atención mucho la presentación de los envases de los juguetes que allí se anunciaban. Se trataba de, entre otros, los siguientes juguetes de su catálogo: Kit de limpieza, Aspirador infantil Rowenta, Cacharritos de cocina, Lavadora ecoBaby y Cafetera expreso.
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Juguetes El Corte Inglés
En todos ellos, se presenta a niñas jugando con los juguetes anunciados (recordemos qué tipo de acción: limpiando, aspirando, cocinando, haciendo la colada), menos en el último, Cafetera expreso, donde se presenta a un niño en actitud de prepararse un delicioso y humeante café con el lema «Disfruta de un café con tus amigos«.
También se puede ver en su página web el «Disfraz infantil doctor Miyo» (presenta a un niño doctor) y el «Disfraz infantil de enfermera Miyo» (presenta a una niña enfermera).
No me pude reprimir y preguntar a los niños qué pensaban sobre lo que veían y los dos coincidieron inmediatamente en el «morro» de los anuncios en los envases de los juguetes Miyo.
Y en cómo presentaban a las niñas ridículamente dedicadas a tareas del hogar y al niño disfrutando del café, que se asocia al placer de después de comer.
Estando de acuerdo en que los juguetes son esenciales para el desarrollo de los niños pequeños, conviene recordar que su publicidad no lo es.
De hecho, desgraciadamente, la publicidad de los juguetes, siendo un legítimo derecho de los fabricantes y distribuidores de su marca propia de juguetes como El Corte Inglés, debe proteger a los niños y ayudarles a asimilar conductas equitativas en el reparto de roles entre hombre y mujer.
Qué dice la ley sobre la publicidad de los juguetes
Para intentar poner coto a esta publicidad, vista la gran influencia que tiene en los niños, que no son capaces de discernir lo que es real, de lo animado, lo que realmente hace un juguete frente a lo que se ve en televisión, jugueteros, consumidores y anunciantes se han puesto de acuerdo.
La asociación de fabricantes de juguetes AEFJ y las asociaciones de consumidores firmaron en 1993 un código deontológico (una especie de código de autorregulación que las empresas se obligan a cumplir) que se ha renovado el 1 de enero de 2016, con la adhesión de la asociación de anunciantes Autocontrol de la Publicidad.
Este código deontológico tiene 57 puntos de los que te resumimos los más relevantes para ti como padre de niños pequeños en relación con el sexismo que la marca Miyo transmite, asociando niñas a tareas del hogar y niños a tareas de descubrimiento o placer:
La publicidad infantil de juguetes debe ser legal, decente, honesta, veraz, hecha con buena fe y oportuna respecto a la edad del niño destinatario del juguete.
Como hemos visto, los envases de los juguetes Miyo, marca de El Corte Inglés, presentan a las niñas desempeñando tareas del hogar. Lo cual no es, cuando menos, oportuno, ni veraz ni honesto porque no ayuda a desterrar las tareas del hogar como una obligación de sólo ellas.
La publicidad infantil de juguetes no debe ser ni violenta, ni asustar a los niños, ni presentar escenas inadecuadas, lenguaje obsceno o discriminación (etnia, género, discapacidad, etc.).
La principal discriminación que introduce El Corte Inglés, con los ridículos envases de sus juguetes Miyo es de género: ellas a limpiar la casa y ellos a disfrutar de un buen café.
Como regla general, los mensajes publicitarios de juguetes evitarán mostrar sesgos de género en la presentación que hacen de niños y niñas. (Mismo comentario que antes).
La presentación escrita, visual y oída de publicidad infantil, no debe inducir a los niños a error sobre la realidad del juguete ni transmitirles valores como estatus, popularidad, crecimiento, habilidad o inteligencia.
Juzgue cada cual si estos juguetes no transmiten a las niñas valores y estatus propios de las amas de casa del siglo pasado.
Precisamente, como recuerda Hipertextual en un artículo que denuncia este sexismo de los juguetes marca El Corte Inglés, está publicado en el BOE de fecha 6 de agosto de 2015, un Plan de El Corte Inglés sobre igualdad de trato entre hombres y mujeres, promoción de la igualdad en la negociación colectiva, lucha contra la discriminación, el acoso sexual y medidas positivas para el fomento de este derecho que no recoge ningún apartado dedicado a la promoción de una imagen equilibrada y no estereotipada de las mujeres (mucho menos en sus propios artículos de marca propia).
Reclamaciones
Para velar por el cumplimiento del Código de publicidad de los juguetes*, las empresas voluntariamente adheridas al mismo se someten a lo que dicte el Jurado de la Publicidad del organismo Autocontrol de la Publicidad en caso de existir una reclamación de otra empresa o de un particular. A su vez habrá una Comisión de Seguimiento del Código, compuesta por representantes de la CNMC, asociaciones de consumidores, y empresas anunciantes.
Normativa relacionada
- Código de autorregulación de la publicidad infantil de juguetes.