La llegada de un hijo/a supone normalmente una gran satisfacción para los padres. Pero también un cúmulo de gastos del que, en ocasiones, no son muy conscientes. Sobre todo se trata de padres primerizos.
Los estudios dicen que tener un hijo puede llegar a costar una media de 50.000 euros si se tiene en cuenta su crianza y educación hasta que es capaz de valerse por sí mismo. Y gran parte de este gasto se da en la etapa de bebé, cuando el hijo/a necesita una cantidad de productos enormes para su cuidado.
Empezando por su alimentación e higiene y terminando por el vestuario, transporte y ocio, el coste económico que supone debe estar previsto con anterioridad por los padres, ya que, de no ser así, puede causar un fuerte impacto que se lleve por delante la economía familiar.
La mejor forma de preverlo es anticiparse con ahorro y tener claro dónde comprar todo lo necesario con el mejor precio posible. Pero esto no siempre esto es posible y hay padres que optan por solicitar un préstamo personal online para afrontar los costes principales, sobre todo cuando nace el bebe. Gracias a internet hay muchas posibilidades para conseguir este tipo de financiación.
Tabla de contenidos
Equipamiento que necesita la mayor inversión
Cuando se empieza a planificar cuáles serán los mayores gastos que habrá con la llegada del pequeño/a, lo primero a considerar será los gastos en higiene y alimentación.
Gastos en higiene
Los pañales, toallitas, cremas, champú… etc. suponen un desembolso importante a lo largo de los dos o tres primeros años.
Alimentación infantil
Igual pasa con la alimentación. Con los tiempos apretados de las madres, habrá poco hueco para la lactancia materna.
Por ello habrá que recurrir a preparados lácteos para bebés (leches de inicio y leches de continuación). Y estos no son precisamente baratos.
Equipamiento
En cuanto al equipamiento, entre lo más caro suele colocarse el carrito del bebé.
Para acertar con su compra, se hace realmente imprescindible un estudio previo de cual comprar, dónde y a qué precio, pues la cantidad de modelos en el mercado es enorme.
En estas circunstancias lo recomendable es encontrar un especialista. Por ejemplo, si buscamos en Google es fácil dar con comparativas de carros de bebé que te ayudarán en esta tarea.
Estas páginas web nos explicarán pormenorizadamente los detalles a prestar atención. Es la forma más fácil de conocer los modelos más vendidos, sus características o las edades para las que son aptos. Y, por supuesto, los mejores precios y ofertas. En ocasiones se puede conseguir hasta un 50-70% de descuento.
Igual que con el cochecito podemos hacer con los demás artículos valiosos, como la cuna, la silla para el coche o los muebles para su habitación.
Contar con una lista de nacimiento en una tienda especializada también suele ser una buena opción. Aunque, en este caso, casi nunca es la opción más económica. Eso sí, es la mejor para controlar los regalos que se recibirán.
En cualquier caso, como se ha mencionado, es importante tener las cuentas claras y acometer solo las compras que puedan afrontarse con nuestros ahorros o con financiación. Pero sin entrar en gastos innecesarios y ajustándose siempre al presupuesto.
Interesante, gracias.