Un emisor térmico es un aparato electrodoméstico de calefacción en el hogar que funciona mediante el calentamiento de un fluido en su interior.
Los emisores térmicos (radiadores de aceite, emisores termoeléctricos, o radiadores de termofluidos) forman parte de las soluciones de sistema eléctrico de calefacción.
Cuentan con una resistencia eléctrica de acero que transmite calor a un aceite especial inodoro. Y se enchufan en cualquier parte.
Tabla de contenidos
Ventajas de los emisores térmicos
Las principales ventajas de los emisores térmicos son estas:
- Se calientan con rapidez.
- Llevan termostato y programador individualizado para lograr una temperatura constante y evitar el sobrecalentamiento.
- No producen gases ni humos. Tampoco emiten residuos que contaminen el ambiente.
- Tienen un bajo consumo de energía.
- Se pueden manejar (apagar o enceder) por móvil por medio de una App.
Se recomienda su uso en casas con niños y animales. Algunos de estos emisores incorporan ionizador, un dispositivo que desprende iones beneficiosos para la salud, porque producen relajación y reducen el stress.
Inconvenientes de los emisores térmicos
Entre los inconvenientes tenemos:
- Precio medio elevado de cada emisor térmico si se tiene que equipar un hogar (sobre los 120-200 euros por emisor en función de su potencia).
- Pueden obligar a contratar más potencia de luz en tu casa. Es decir que se incrementa el término fijo de tu factura eléctrica del hogar, especialmente en los meses fríos del año.
Consejo de compra
Un consejo al comprarlos: dejar reposar en su posición natural el radiador sin utilizarlo varias horas para que se asiente todo su aceite.
Su viaje a nuestro hogar y manipulado habrán hecho que el aceite esté disperso y podrán no funcionar inmediatamente o hacernos creer que no lo hacen.
Consejo de uso
Un consejo al usarlos: no cubrirlos con nada ni utilizarlos para secar ropa.