En Consumoteca tenemos una sección dedicada al mundo de los seguros. Ya hemos visto en otro post, que en España es obligatorio conducir asegurado con al menos la cobertura llamada de responsabilidad civil obligatoria, seguro a terceros, o seguro obligatorio de automóviles (SOA). El SOA es una de las posibilidades que tenemos cuando hablamos de seguros de coche.
Este seguro cubre nuestra responsabilidad civil (la responsabilidad penal es nuestra e intransferible) por los daños personales y materiales que podamos causar con nuestro coche (conduciendo nosotros o no, salvo que demostremos que nos lo robaron los cacos, quienes causaron el accidente) a un tercero, con unos límites que la ley fija en hasta 15.000.000 € por siniestro por los daños materiales que causemos, y hasta 70.000.000 € por siniestro para los daños corporales que causemos a dichos terceros con motivo de nuestra conducción, cualquiera que sea el número de víctimas.
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Conductores no cubiertos
Hemos visto también que algunos grupos de conductores como los muy jóvenes o noveles o con siniestros importantes anteriores pueden no querer ser asegurados por una aseguradora privada por lo que el Consorcio de Compensación de Seguros se ocupa en estos casos de garantizarles la contratación de la cobertura de la RC obligatoria.
Responsabilidad civil ampliada
Pero hay compañías de seguros que, visto el poco impacto adicional en la prima de seguro (lo que cuesta un seguro) que supone, amplían de forma indefinida los anteriores límites de 70 y 15 millones de euros en daños materiales y personales respectivamente, te ofrecen lo que llamamos una responsabilidad civil ampliada, responsabilidad civil voluntaria ilimitada o indefinida.
Ojo, que cuando además de ampliarte los límites del SOA, estas aseguradoras te añaden otras coberturas como el robo, el incendio o la rotura de lunas del coche, hablamos de seguro a terceros ampliado.
La cobertura de robo del vehículo cubrirá su robo o los destrozos producidos en nuestro coche por la simple tentativa (cerraduras, abolladuras, etc.). El incendio del coche cubrirá los daños en el coche si se incendiara o fuera golpeado por una explosión o un rayo y la reparación y/o la reposición de las lunas del coche incluye justamente eso: arreglar un cristal agrietado o reponerlo si está roto.
Normativa que regula el seguro de coche a terceros
-Ley 50/1980, de 8 de octubre, del Contrato de Seguro (ver online).
-Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor (ver online).