Si echamos la vista atrás un año, podemos apreciar la que se nos está viniendo encima con la escalada de precios de los productos esenciales. La gasolina, los alimentos, las hipotecas, la vivienda. Todo está subiendo mucho más que nuestros sueldos. Estamos entrando en una época en la que va a haber que apretarse mucho el cinturón.
Para muchas personas, llegar a fin de mes, nuevamente, comienza a ser un problemón, y tienen que recurrir al crédito rápido para cubrir alguna urgencia mientras llega la siguiente nómina. Para ellos, la mejor opción es hacer comparativas de minicréditos y elegir aquél que ofrezca las mejores condiciones globales.
En este post te explicamos cómo es posible obtener un crédito en menos de 24 horas. Y te damos consejos para que, si recurres a esta forma de financiación, lo hagas con cabeza.
Tabla de contenidos
Qué es un crédito rápido
Un crédito rápido o minicrédito es un préstamo de pequeña cuantía (rondará los 300 euros) que un prestamista concede al prestatario con un compromiso de devolución muy corto de tiempo, que rondará los 30 días.
Las empresas de créditos rápidos cumplen una función importante en la economía de un país porque cubren un nicho de negocio por el que los bancos, no apuestan. Gracias a su actividad, muchas personas con dificultades para llegar a fin de mes, pueden conseguir «tirar p´alante» unos días más, mientras les llega algún ingreso con el que hacer frente al propio crédito.
Pedir uno es muy fácil, sobre todo si se ha hecho la tarea previa de identificar al prestamista más interesante.
Basta con acceder a la web de la empresa de minicréditos, indicar cuantía y plazo de devolución del crédito y rellenar el formulario de datos personales aportando algunos documentos.
Con estos datos, la empresa de créditos hace una valoración del riesgo del préstamo (la posibilidad de que no seamos capaces de devolverlo) y nos confirma, en un plazo rápido que puede ser de 5 minutos si nos lo concede, procediendo a su abono en nuestra cuenta bancaria.
Por qué es bueno hacer comparativas de minicréditos
Comparar antes de contratar es la mejor acción que puede hacer un consumidor. Ya se trate de productos o de servicios, mediante la comparación podemos ver los puntos fuertes y débiles de las distintas alternativas y elegir la que mejor nos convenga. Siempre que se trata de productos o servicios comparables entre sí, por supuesto.
En el mundo financiero, el indicador más fiable de una comparativa es la TAE o tasa anual equivalente. La TAE tiene en cuenta el coste de la financiación en sentido amplio. Es decir, que tiene en cuenta tanto el tipo de interés nominal del crédito como las posibles comisiones por la apertura o concesión del préstamo rápido.
Pero al ser este tipo de créditos rápidos de una duración muy reducida cercana al mes, la TAE, que es una tasa anual, puede quedar desvirtuada. Así que un segundo indicador a tener en cuenta es cuánto dinero (principal más intereses) tenemos que devolver cuando termine el crédito y en qué condiciones.
Para ello se recomienda prestar atención a las condiciones, los términos de reembolso, los tipos de interés y las penalizaciones en caso de no devolver el principal del crédito en el plazo acordado.
¿Se puede obtener con celeridad un crédito rápido?
La respuesta a esta pregunta es sí, de entrada, porque se pueden solicitar online, con el móvil o el PC, cualquier día de la semana y a cualquier hora del día, sin necesidad de papeleos.
Pero, una vez hecha la solicitud, la aprobación dependerá del historial crediticio del solicitante, de la documentación aportada y de su solvencia. Ni más ni menos.
Si es la primera vez que lo solicitas, cuentas con ingresos regulares suficientes y nunca has dejado recibos impagados, lo más probable es que tu crédito rápido se autorice en menos de 24 horas.
Al contrario, si eres un usuario recurrente de este tipo de servicios y no tienes ingresos suficientes para hacer frente a los compromisos de pago y/o alguna vez dejaste recibos impagados de cualquier servicio, encontrarás dificultades a la hora de solicitar un nuevo crédito.
En cualquier caso, sigue estos tres consejos para agilizar la solicitud:
- Prepara los documentos. No es necesario preparar una carpeta de documentación interminable. Solo su identificación española y un justificante de tus ingresos. Otros archivos a adjuntar podrán incluir tu número de teléfono móvil válido para el registro y un número de cuenta bancaria para el ingreso del importe si se te concede.
- Ten bien clara la cantidad que necesitas antes de solicitar el crédito. Un error que hacen los prestatarios cuando solicitan crédito web rápido es la perplejidad con una cantidad requerida. Primero, solicitan € 100, luego olvidan que necesitan más y solicitan € 100 adicionales con otra compañía porque el primero no aprobará dos préstamos simultáneos. Como resultado, debe preocuparse por dos préstamos.
- Elige un plazo de reembolso realista. Por lo general, las cantidades solicitadas son posibles de pagar dentro de los 15 y 30 días siguientes. Pero, debes estar seguro/a sobre el período de tiempo exacto en el que contarás con ingresos suficientes para devolver el crédito con sus intereses. De lo contrario, si no logras devolver tu crédito en forma y plazo, te aplicarán penalizaciones.
Consejos antes de pedir un crédito rápido
Si tras hacer comparativas de minicréditos ya te has decicido por un prestamista online concreto para obtener un crédito rápido, lee estos consejos:
- Recurre al crédito rápido como último recurso en caso de una situación puntual. No lo hagas por sistema si no quieres entrar en una espiral de ingreso-gasto-intereses.
- Pide solo la cantidad que realmente necesites y que te sea imprescindible obtener. No recurras al crédito rápido para consumir cosas que no sean básicas como comprar moda, ocio, caprichos, etc.
Es decir, nunca mastiques más de lo que puedas tragar. Si pides más dinero del que puedes devolver entrarás en la fatídica espiral de ingreso dinero, se va todo para devolver deudas y me cargan intereses por la deuda no devuelta. - Antes de contratar lee los compromisos de pago (de devolución) del crédito y haz autoanálisis para saber si serás capaz de devolver el dinero a tiempo.
- Si llegado el plazo de devolución del crédito no puedes hacer frente a la suma prestada, contacta al prestamista e intenta negociar con él una ampliación de ese plazo.
Si no lo haces, te afectará en gran medida en los próximos préstamos. Y algunos prestamistas simplemente te rechazarán por desconfianza y por tu historial de pagos negativo.
El crédito es una necesidad para mucha gente que no llega a fin de mes. Pero debe ser solicitado con toda la cautela y consciencia posible para evitar caer en la pobreza.