El sobreendeudamiento se ha convertido en un problema acuciante para numerosas familias españolas. Según datos del Banco de España, este primer trimestre de 2019, las familias españolas tenían solicitado un saldo vivo de casi 81.000 millones de euros en créditos al consumo. Esta cantidad se desglosa en dos grandes grupos: 45.500 millones son financiación de bienes duraderos (vehículos) y otros 35.300 millones se gastan en servicios y bienes no duraderos.
Estas elevadas cifras preocupan al regulador bancario por los problemas para las entidades financieras prestamistas en caso de que los consumidores deudores tengan problemas de solvencia. Primero porque ponen de manifiesto que los consumidores recurrimos cada vez más a la financiación ajena para permitirnos acceder a productos y servicios que no podemos pagar al contado. Y segundo porque le estamos cogiendo el gusto a las soluciones financieras rápidas y directas como pueden ser las líneas de crédito o los micropréstamos. Así que, siempre que nos vayamos a endeudar, conviene elegir bien, y para eso hay soluciones interesantes en el mercado como el comparador de productos financieros Financer.com.
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Causas del sobreendeudamiento
Detrás de ese sobreendeudamiento está muchas veces la falta de información. Y es ahí donde juegan un papel destacado soluciones como el comparador de préstamos rápidos de Financer.com. Se trata de un portal comparador de préstamos, que está ayudando a miles de familias a elegir la mejor solución de financiación y su forma, ya sea mediante línea de crédito o de préstamo.
Esta web es capaz de comparar los productos financieros de cerca de 200 entidades, tanto en forma de préstamos como en forma de cuentas y depósitos de ahorro. En el primer caso, cuando el usuario introduce una solicitud de financiación (cantidad y plazo de devolución), Financer le muestra en las primeras posiciones de su listado los productos financieros más interesantes. Y además incluye información detallada sobre sus condiciones y características individuales, para que el cliente tome una decisión meditada y con argumentos sólidos.
Líneas de crédito y préstamos rápidos, ¿en qué se diferencian?
Los dos productos han sido diseñados por las industria bancaria para resolver problemas de liquidez, pero presentan diferencias importantes que te aclaramos.
- Una línea de crédito o préstamo permanente es una forma de financiación por la que una entidad prestamista pone a disposición de su cliente una determinada cantidad de dinero con un límite máximo. El usuario puede en todo momento disponer de todo o parte del capital y pagará intereses sólo por el saldo dispuesto. También puede no disponer (utilizar) de ninguna cantidad, en cuyo caso no pagaría intereses por el crédito que se le ha concedido previamente. Una vez agotada la línea de crédito, el cliente tendrá a su disposición otra cantidad idéntica, para irla utilizando cuando lo estime oportuno. De esta manera, el titular dispone siempre de un colchón financiero estable. En cuando a la devolución del dinero, puede hacerse en varias veces.
- Los préstamos rápidos, por su parte, son créditos instantáneos más rígidos, que deben devolverse en una fecha determinada. Además, si el cliente necesita más
capital, ha de solicitar un préstamo nuevo.
Consejos de última hora
Financer España recuerda que los préstamos rápidos tiene una finalidad concreta, que es la de cubrir necesidades puntuales y urgentes. No se recomiendan como recurso financiero permanente. Para los clientes que deseen disponer de una reserva de capital estable, la opción más recomendable es la línea de crédito. Además, la devolución es flexible y el titular puede elegir el número de cuotas que más le convenga.
¿Y qué pasa con los intereses y comisiones?
Financer.es facilita una información detallada sobre este aspecto. Es importante saber que algunos prestamistas cobran gastos por la disposición de dinero en las líneas de crédito. En cuanto a los intereses, dependerán de la cantidad utilizada. Si el dinero gastado excede la línea de crédito, los intereses serán mayores.
Otro aspecto que resalta el comparador de Financer es que, pese a las similitudes, las líneas de crédito no tienen las mismas características que las tarjetas de crédito. Las comisiones que se cobran cuando usas una línea de crédito o tiras del crédito de tu tarjeta son muy distintas y conviene estar atentos a la letra pequeña.
En resumen, a la hora de elegir, todo dependerá del perfil del cliente y de sus necesidades financieras. Si el consumidor desea un colchón estable, lo mejor es que opte por la línea de crédito, pero si tan solo precisa cubrir una urgencia, la respuesta es el préstamo rápido.