En los tiempos que corren, cualquier ahorro en el presupuesto familiar vendrá muy, pero que muy bien. A diferencia de una lavadora rota que hay que sustituirla de inmediato, cambiar de colchón es una compra meditada. Pero hoy es posible comprar colchones baratos y que te los lleven a casa por poco dinero. Cambia de colchón periódicamente, tu salud te lo agradecerá.
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La importancia de dormir bien
El sueño es una de las cosas que no debes perdonar nunca. Una persona capaz de dormir entre 7 y 9 horas diarias, día tras día, podrá a priori vivir más años. Y lo hará más tranquila y plena.
Según la Fundación del Corazón, un sueño correcto ayuda a tu cerebro y la memoria a rendir mejor. También ayuda a estar más sano ya que favorece la pérdida de peso, mejora la memoria, protege el corazón o reduce las depresiones, entre otras ventajas.
Por qué deberías de cambiar de colchón
Mucha de la calidad de nuestro sueño dependerá de nuestra cama, que es la conjunción de una buena base y de un colchón. El colchón, es la parte más crítica de este tándem, ya que recibe cada noche nuestro cuerpo, lo acoge y nos garantiza poder conciliar el sueño.
Si hace más de diez años que no cambias tu colchón de uso diario, es hora de hacerlo. La señal te la podrán dar la aparición de rigideces, ruidos al cambiar de posición o hundimientos en zonas de la cama.
Pero, además, si tu colchón ha sufrido transpiración, enfermedades o ácaros durante un tiempo, es aconsejable su cambio por un colchón nuevo.
Cómo comprar un colchón nuevo
Lo primero que tienes que ver si decides cambiar de colchón es el tipo de colchón que más te interesa para tu edad y condición física. Lo segundo es que si padeces de la espalda deberías pedir un colchón con refuerzo lumbar. Y si sois dos, pide un colchón con dos zonas de descanso independientes.
En el mercado tienes varios tipos de colchones pero los más vendidos son los de muelles y los de espuma. La espuma engloba, a su vez, a los colchones viscoelásticos y a los de látex.
Los colchones de espuma se producen mediante la técnica de la espumación. Se obtienen insuflando aire comprimido en un material gelatinoso para conseguir una espuma compacta llena de burbujas. Una vez conseguida la forma, el conjunto se trata con resinas estabilizadoras y materiales endurecedores para darle una forma final. Se obtiene así un bloque homogéneo, aunque poroso, muy adecuado para el descanso.
Veamos cada uno de estos tres tipos de colchones.
Colchones de muelles
Los colchones de muelle no tienen nada que ver con la caricatura que muchos hacen de ellos. Hay en el mercado, a muy buen precio, colchones de muelles de última generación.
Lo importante es que que los muelles sean independientes y resistentes, ya sean embolsados o con forma de doble cono (“carcasa tipo Bonell”).
Ten en cuenta que la firmeza del colchón dependerá del refuerzo de los muelles así como de la cantidad de estos que contenga.
Estos colchones se pueden encontrar a precios bastante baratos.
Colchones de viscoelástica
Los colchones viscoelásticos se empezaron a vender en España en los años 1990. Existen dos tipos de viscoelástico, el espumado y el moldeado.
- El material viscoelástico espumado o de “poro abierto”, se mezcla con espumas de baja densidad para abaratar el producto final.
- Por su parte, el viscoelástico moldeado tiene un poro más pequeño y la circulación del aire es más lenta. Es superior en calidad y precio.
Los colchones viscoelásticos tienen una firmeza intermedia óptima (son menos duros que los de muelles y menos blandos que los de látex).
Además, se adaptan bien al cuerpo manteniendo una correcta alineación de la columna vertebral. Según los fabricantes y tiendas de colchones, son los más recomendados para problemas de espalda (lumbares, musculares, de articulación, etc.).
Ojo, no se recomienda usar estos colchones por las dos caras por lo que no se deben dar la vuelta nunca, a diferencia del resto de colchones.
Colchones de látex
Los colchones de látex tienen en su núcleo interior este material extraído de la resina del árbol del caucho. Se consideran de látex 100% naturales los colchones con más del 85% de látex natural en su composición. Cuanto mayor el porcentaje de látex natural que contenga el colchón, mejores su calidad y confort.
Luego existe también, a un precio más barato, el látex sintético, material químico derivado del petróleo. Estos colchones son más firmes y por tanto menos elásticos. Entre medias está el látex mixto.
En este tipo de colchones, lo importante es informarte sobre la densidad del látex. Cuanto menor sea esta, más mullido el colchón. Y si es demasiado alta, más rígido será. Una densidad idónea sería la intermedia de 75 kilos/m3.
La ventaja de los colchones de látex es que se amoldan al cuerpo y a nuestros cambios de postura al dormir sin perder la firmeza necesaria para descansar bien.
Además tienen una gran capacidad de recuperación sin deformarse. Son colchones transpirables y son hipoalergénicos (no provocan alergias) y resistentes a la suciedad, ya que los ácaros no anidan en él.
Consejos de compra online
Si compras tu colchón online ten en cuenta estos aspectos:
- Gastos de envío y qué incluyen exactamente. Ten en cuenta que hay agencias de transporte que te dejarán el producto a pie de calle y otras que te lo subirán a casa y te harán el montaje. Esto último puede tener un coste mayor ya que el colchón es muy aparatoso de trasnportar.
- En el momento de la entrega revisa el número de bultos que te entregan y el estado del embalaje. Rechaza el colchón si presentara deformaciones o golpes.
- Pregunta si con la entrega de tu nuevo colchón te retiran el viejo colchón. Y si tiene un coste adicional.
- Respecto a las devoluciones, pregunta en qué supuestos y durante cuánto tiempo tras la compra online podrías devolver el colchón.
Ten en cuenta que, una vez desprecintado y usado, el colchón no te lo van a admitir. Así que antes de desprecintarlo, procura probarlo sin romper ni tirar el embalaje interno y externo del colchón. Aunque ya hay alguna interesante sentencia europea en contra de esta negativa al derecho de desistimiento.
¡Que lo duermas bien!