Según los pronósticos, el consumo durante el Black Friday aumentará más de un 60% con respecto al resto del año. Celebrado el 29 de noviembre, el Black Friday -traducido al español como Viernes Negro- pone a disposición de los clientes un gran número de descuentos y ofertas para comprar al mejor precio diferentes bienes y servicios.
Por este motivo, el consumo se dispara substancialmente durante toda la semana, ya que muchas personas reservan determinadas compras para esta época del año. Por ejemplo, es común esperar a esta fecha para renovar la lavadora o comprar los vuelos para un viaje. Así, las necesidades básicas y los caprichos personales se reservan para este día, en el que los descuentos alcanzan generalmente las dos cifras. Además, el Black Friday inaugura la época de compras navideñas, por lo que muchos clientes aprovechan la ocasión para adquirir los regalos de la próxima Navidad.
En este sentido, el Black Friday se ha convertido en el día perfecto para comprar aquello que hemos deseado durante todo el año o, por lo menos, desde el anterior período de rebajas. Por esta razón, muchas personas optan por solicitar pequeños préstamos en entidades de crédito para poder sufragar todos los gastos, sin necesidad de tocar los ahorros personales.
Un mercado fundamentalmente online
El Black Friday es un evento comercial que tiene lugar principalmente en internet, debido a que la mayoría de la gente prefiere hacer sus compras este día a través de la web, para no tener que esperar largas colas en los establecimientos físicos. Así, según datos del informe «Pink Friday 2019 elaborado por la financiera española Bnext, el 55% de la ciudadanía optará por realizar sus compras a través de internet. No obstante, frente a este 55%, existe un 45% de personas que preferirán el método tradicional y acudirán a las tiendas a realizar sus compras.
En este sentido, los datos recogidos en el informe reflejan también una diferencia generacional a la hora de comprar online o físicamente. De este modo, son los clientes que se encuentran entre los 35 y los 44 años los que prefieren mayoritariamente comprar por internet, mientras que aquellas personas con edades superiores a los 45 años acudirán principalmente a las tiendas.
Asimismo, dicho informe también muestra las variaciones en el gasto medio en función de si se compra a través de internet o en un establecimiento comercial. De esta manera, el gasto medio en las tiendas físicas será de 55 euros, mientras que las compras online ascenderán hasta los 70 euros.
Además, contrariamente a lo que se podría pensar a priori, habrá más de un 70% de hombres que realizarán una compra este día frente a un 28% de las mujeres. Igualmente, el bloque más ahorrador será un año más el de la población más joven, estudiantes o trabajadores precarios que no realizarán grandes gastos durante la jornada.
Sin embargo, pese a las diferencias que existen entre los diferentes grupos sociales, los españoles se dejarán de media 114 euros por persona, en una cita comercial donde los precios se desplomarán significativamente y el volumen de compras se disparará.