En España ya estamos notando el efecto de la ley sobre reducción del consumo de bolsas de plástico (normativa bolsas de plástico 2018). Al menos en la forma de tener que pagar por ellas en supermercados y todo tipo de comercios. El simple hecho de cobrarnos entre 5 y 10 céntimos por bolsa en el súper ya está consiguiendo que rechacemos pagar por algo que desde siempre había sido gratuito. Y lo más importante, que pensemos antes en llevar nuestras propias bolsas de varios usos con nosotros.
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Qué dice la ley
La normativa vigente desde 2018 es el Real Decreto 293/2018 (ver más abajo). Esta norma marcaba tres fechas especiales que tenemos que tener en cuenta si queremos ser buenos consumidores. Una era julio del año pasado, 2018, otra enero de 2020 y la tercera, enero de 2021.
Desde 1 de julio de 2018
Desde julio de 2018, está prohibido que nos den bolsas de plástico en supermercados y comercios. La única excepción son las bolsas de plástico muy ligeras y las bolsas de plástico con espesor igual o superior a 50 micras con un porcentaje igual o mayor al 70% de plástico reciclado (y que el comerciante pueda probar por el fabricante que esto es así).
Desde hace un año, los comerciantes nos cobran por cada bolsa de plástico que les pidamos. Si eres de los que les fastidia que te cobren por la bolsa has de saber dos cosas:
- Que el citado real decreto recomienda en su Anexo I los precios orientativos a cobrar al consumidor en los establecimientos en función del espesor de las bolsas:
- Bolsas de espesor inferior a 15 micras: 5 céntimos de euro/bolsa.
- Bolsas 15 a 49 micras de espesor: 15 céntimos de euro/bolsa.
- Bolsas de 50 micras de espesor o superior: 15 céntimos de euro/bolsa.
- Bolsas de 50 micras de espesor o superior, con contenido igual o superior a 50% de plástico reciclado pero inferior al 70%: 10 céntimos de euros/ bolsa.
- Que los comerciantes te deben informa de estos precios establecidos en lugar visible.
A partir del 1 de enero de 2020
En 2020 se va a prohibir la entrega a los consumidores, en los puntos de venta de bienes o productos, de bolsas de plástico fragmentables. Además, las bolsas de plástico de espesor igual o superior a 50 micras deberán contener un porcentaje mínimo del 50% de plástico reciclado.
A partir del 1 de enero de 2021
En 2021, se prohibirá la entrega de bolsas de plástico ligeras y muy ligeras al consumidor en los puntos de venta de bienes o productos. La única excepción serán las bolsas de plástico compostable. Los comerciantes podrán también optar por otros formatos de envases para substituir a las bolsas de plástico (por ejemplo, el papel).
Qué podemos hacer los consumidores
La mejor forma de ayudar al medioambiente es dejar de consumir en todo lo que podamos bolsas de plástico cuando vayamos de compras. El consumo responsable de bolsas de plástico y embalajes tiene que ver con las tres erres: reducir, reutilizar y reciclar.
–Reducir significa no pedir una bolsa de plástico si realmente no la necesitamos. Y por supuesto no utilizar pajitas, vasos, platos y cubiertos desechables, por muy baratos y prácticos que sean. También los perjudiciales bastoncillos para los oídos.
–Reutilizar significa utilizar bolsas de la compra de muchos usos, que además de duraderas aguantan el peso. Y también buscar materiales alternativos como las bolsas de tela o las bolsas de papel. Y buscar usos alternativos para todos los embalajes que nos entregan los fabricantes y distribuidores cuando compramos algo.
–Reciclar nos exige tratar los desechos que producimos en casa y la oficina debidamente. Tan solo con el gesto de echar cada residuo en su correspondiente cubo de la basura es una gran ayuda y reduce los costes de reciclado de las empresas que tratan nuestros residuos domésticos.
Los consumidores tenemos que concienciarnos sobre la necesidad de reducir la cantidad de deshechos plásticos que producimos y tiramos sin apenas uso, partiendo del principio de que “el mejor residuo es el que no se produce”.
También se necesita la concienciación de todos los comerciantes. No se trata de cobrar por las bolsas de plástico cuando venden algo, sino de directamente adelantarse a 2021 y no ofrecerlas, u ofrecer bolsas de materiales alternativos desechables como el papel o de varios usos. Un compromiso por parte de las asociaciones de comerciantes y grandes
superficies estaría fenomenal si queremos que nuestros nietos y demás descendientes se encuentren un mundo limpio y descontaminado.
Las administraciones públicas también podrían ayudar a concienciarnos publicando datos positivos sobre el impacto que la normativa y el cambio de costumbres en el comercio en relación con el cobro por las bolsas de plástico está teniendo.
Normativa sobre bolsas de plástico
Directiva 94/62/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 20 de diciembre de 1994, relativa a los envases y residuos de envases.
Ley 11/1997, de 24 de abril, de Envases y Residuos de Envases.
Real Decreto 782/1998, de 30 de abril, por el que se aprueba el Reglamento para el desarrollo y ejecución de la Ley 11/1997, de 24 de abril, de Envases y Residuos de Envases
Ley 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados.
Programa Estatal de Prevención de Residuos 2014-2020.
Directiva (UE) 2015/720 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 29 de abril de 2015, por la que se modifica la Directiva 94/62/CE en lo que se refiere a la reducción del consumo de bolsas de plástico ligeras.
Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos 2016-2025 (PEMAR)
Real Decreto 293/2018, de 18 de mayo, sobre reducción del consumo de bolsas de plástico y por el que se crea el Registro de Productores (BOE de 19 de mayo de 2019).
