Si eres, como el que escribe, de los que proviene de padre y abuelo calvo, tus posibilidades de escapar de la alopecia androgenética son realmente nulas. Pero, hoy en día, gracias a las clínicas de injerto capilar, se están produciendo grandes avances en los transplantes de pelo. Ahora, bien, más te vale elegir bien tu clínica, porque un injerto capilar mal hecho te puede costar caro. No solo en dinero sino que afectará a tu salud mental y estado de ánimo. En este post examinamos los criterios para elegir la mejor clínica de injerto capilar Madrid o en Barcelona de la mano de Logicalia.
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La alopecia como signo de los tiempos
Hay muchos tipos de calvicie o alopecia (común, por estrés, en el hombre, en la mujer, por enfermedades, etc.) pero la más común es la androgénica.
Esta tiene una causa genética, relacionada con el cromosoma X que portamos tanto hombres (XY) como mujeres (XX). Aunque la alopecia androgénica depende más de la madre que tenga un padre alopécico (abuelo materno calvo), también quien cuente con un padre o abuelo paterno calvos, puede serlo. En estos casos se habla de alopecia hereditaria o genética.
Soluciones para la alopecia
Una de las soluciones, recomendada en los estadíos iniciales de caída del pelo es el injerto capilar. El injerto capilar no es más que un transplante de folículos de una zona donante de la cabeza del paciente a las zonas despobladas.
La parte donante por excelencia suele ser la occipital (el pelo de la nuca), que suele ser más frondoso y con folículos más sanos. También el pelo de las sienes es frondoso y resistente. De ahí, se extraen uno a uno los folículos a transplantar en la zona frontal de la cabeza del paciente. Esta, debe ser previamente anestesiada ya que el implante requiere incisiones microscópicas en la piel que son dolorosas.
Tras una sesión que puede durar todo el día por la minuciosidad que requiere, el paciente debe permanecer varios días sin poder tocar la zona transplantada para evitar la caída de los folículos transplantados.
Qué clínica de injerto capilar elegir
La decisión de hacerse un transplante de pelo no se toma de un día para otro. De hecho, son muchos los adultos que «rumian» durante meses, incluso uno o dos años, la posibilidad de realizarse un injerto capilar. Pero qué duda cabe que el hecho de ver cada vez más famosos con injerto capilar aparentemente bien hecho y testimonios de clientes satisfechos, anima bastante a dar el paso.
No obstante, una vez que se deciden a ello, conviene tener en cuenta una serie de advertencias a la hora de elegir la mejor clínica de transplante capilar. Obviamente, es en las ciudades grandes donde más garantía y opciones se encontrarán. En Madrid y Barcelona (ver clínicas de injerto capilar Barcelona) hay buenas opciones.
A continuación te damos cinco pistas para saber distinguir una buena clínica de una mala, para evitar un injerto capilar mal hecho.
No todas las alopecias se tratan con microinjerto capilar
Como hemos visto hay muchos tipos de alopecia por lo que es importante que el médico experto diagnostique la causa de la nuestra. En el caso de poder ser tratable con transplante capilar, también conviene saber que este injerto es recomendable a partir de la treintena y no recomendable en jóvenes.
La razón es que una persona de 20 años con alopecia androgénica va a sufrir un avance de la misma inestable, con lo cual el transplante puede resultar ser un fracaso si tras el mismo otras zonas del cuero cabelludo se debilitan y se sigue perdiendo pelo.
Se trata de un tratamiento médico
No cualquier persona puede abrir una clínica y dedicarse a hacer injertos de pelo. Lo deseable y legal es que la clínica la dirija un profesional médico titulado en cirugía. Y que el diagnóstico y tratamiento al que nos sometamos esté supervisado por un equipo técnico sanitario.
Y lo es por una sencilla razón: el diagnóstico de nuestros problemas capilares para identificar sus causas, el tratamiento a aplicar y la intervención requieren ponerse en manos de un médico especialista. Además, a veces el diagnóstico desaconseja el transplante por poder corregirse las causas de la caída de cabello. O hay varios posibles tratamientos y debes elegir el que desees realizarte.
Además, la intervención en sí misma requiere unas precauciones previas, durante y después. Unos días antes no es recomendable ingerir medicamentos que fomenten el sangrado (aspirina, antiinflamatorios, complejos vitamínicos). Tampoco realizar deporte intensivo, beber alcohol o fumar antes de la operación. Y se nos debe hacer una analítica completa como en cualquier operación.
El día de la operación se procede a la aplicación de anestesia local en la zona donante y a transplantar. Y esto solo lo debe hacer un anestesista, al igual que la extracción cuidadosa de los folículos a transplantar la debe hacer un cirujano, ambos titulados.
Solo esta tarea de extracción puede llevar de dos a tres horas de tiempo. Si se suma a las dos o tres horas del transplante, más nos vale confiar todo el proceso a manos expertas.
El tratamiento se debe mantener a posteriori
Los especialistas en transplante capilar recomiendan seguir un tratamiento orientado a la conservación del pelo transplantado, pero también al demás pelo que podamos conservar.
Si no se lleva a cabo este tratamiento se corre el riesgo de conservar el pelo transplantado y seguir perdiendo pelo en las demás zonas no tratadas.
Esto es lo que a los entre 5 y 10 años posteriores a la operación desencadena un injerto capilar mal hecho.
Huir del presupuesto más barato
Ir a precio exclusivamente a la hora de elegir un tratamiento y una intervención quirúgica como un injerto capilar es muy arriesgado. Es mucho mejor analizar dos o tres propuestas y elegir aquella que nos dé una mayor confianza y sobre la que podamos conocer testimonios y opiniones de pacientes de injerto capilar.
